9.79 es la estratosférica marca con la que Ben Johnson batió a Carl Lewis en la final masculina de los 100 metros lisos de los Juegos Olímpicos de Seúl (1988). Sin embargo, la medalla de oro sólo estuvo en su poder dos días, los que tardó en dar positivo por el uso de anabolizantes. Cinco de los ocho participantes en aquella carrera han visto cuestionados sus triunfos, de una u otra manera, por el dopaje y, así, uno de los momentos más emocionantes del atletismo, la llamada 'carrera del siglo', ha pasado a la historia como el mayor escándalo de la era olímpica moderna. En este documental los ocho atletas que corrieron la final y sus entrenadores dan su propia versión de los acontecimientos y de la influencia del dopaje en el mundo del deporte.