Adaptación de la hilarante y satírica obra de teatro de Oscar Wilde a manos del genial e ingenioso Lubitsch. Lady Windermere disfruta de una confortable y tranquila vida mundana en Londres cuando Mrs Erlynne, una mujer de dudosa reputación, se pone en contacto con Lord Windermere: sólo a él le revela que es la madre de su esposa, a quien ésta cree muerta. Temiendo el choque que esto podría suponerle a su mujer, Lord Windermere le presta dinero para que solucione sus problemas económicos, con el acuerdo tácito de que guarde silencio. Sin embargo, poco a poco, los rumores aumentan y Lady Windermere acaba por sospechar que su marido tiene una aventura con ella. Durante el transcurso de una velada, Lady Windermere cree sorprenderles juntos y, despechada, se escapa a la casa de Lord Darlington, un pretendiente suyo al que anteriormente había rechazado. Mrs. Erlynne la sigue entonces para impedir que cometa el mismo error que a ella le llevó al desprestigio social. Mientras ambas mujeres discuten en casa de Lord Darlington, éste llega acompañado por todos los hombres de la velada, entre ellos Lord Windermere. Las dos mujeres se refugian entonces en otra pieza del apartamento, pero Lady Windermere olvida su abanico sobre el sofá de la estancia anterior.